Un estudio en la Universidad de Purdue en los Estados Unidos descubrió que la cucaracha alemana, común en todo el mundo, está naciendo con protección contra sustancias químicas con las que aún no ha entrado en contacto. El estudio, publicado en la revista científica "Live Science" el 25 de junio, concluyó que Blattella germanica evolucionó y desarrolló la inmunidad a los nuevos venenos.
"No teníamos idea de que algo como esto podría suceder tan rápidamente", dijo el coautor del estudio Michael Scharf en un comunicado publicado en el sitio web de la universidad. "Las cucarachas que desarrollan resistencia a múltiples clases de insecticidas a la vez harán que el control de estas plagas sea casi imposible si solo usamos químicos".
El estudio se realizó en varios edificios de las ciudades centrales de los estados de Illinois e Indiana (Estados Unidos) y en los laboratorios de la Universidad de Purdue (EE. UU.). Todos tenían infestaciones de cucarachas. Los investigadores utilizaron varias combinaciones de rociadores y estudiaron múltiples generaciones de cucarachas para llegar a la conclusión.
Las cucarachas alemanas, que se reproducen rápidamente y buscan áreas ocupadas por personas, se describen en el informe como "la especie que da mala fama a todas las demás cucarachas".
El informe sugiere que evitar que estas ahora llamadas 'súper cucarachas' propaguen bacterias y enfermedades en el futuro dependerá más de las trampas que de las sustancias químicas. Una cucaracha alemana puede poner 400 huevos para toda la vida. La buena noticia es que, a pesar de tener alas, esta especie de cucaracha aparentemente evolutiva "rara vez vuela", según los investigadores.