Un vídeo reciente de la NASA es otra de las demostraciones de cómo la naturaleza sorprende cada día más. Un mar de arena saliendo del Desierto del Sahara hacia la selva amazónica, haciendo un viaje de más de 2000 km.
Los datos fueron recolectados entre los años 2003 a 2007, pero la sociedad sólo tuvo acceso a la información recientemente.
La estimación es que, aproximadamente, 182 mil toneladas de arena del Sahara atravesan el océano Atlántico para llegar hasta América, siendo que de ese total, cerca de 28 millones llegan cada año en la cuenca amazónica.
El Dr. Hongbin Yu, coordinador de la investigación, relata que "Todo el ecosistema de la Amazonía depende del polvo del Sahara para reabastecer sus reservas de nutrientes perdidos".
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